sábado, 10 de septiembre de 2011

miércoles, 6 de julio de 2011

Un metro cuadrado

¿Qué pasaría si no tuviera todo lo que tengo?

Me quedo sin palabras, pero tambien me da miedo perder lo que tengo por el paso del tiempo.

Tambien me da miedo perder oportunidades para luego no lamentar el tiempo perdido.

Pero lo que más miedo me da es perder este tiempo, que no vuelva y no saber como hacer para que vuelva.

Me siento muy féliz, egocentricamente féliz, a pesar de todo, pero me da miedo tanta felicidad sólo vinculada a mi misma, y luego qué?

VIVAN LOS ORGANILLOS EN LAS CANCIONES
Y LOS VODKAS CON TONICA EN VASO DE MARTINI
Y MI MELENAZA

miércoles, 4 de mayo de 2011



De cuando en cuando tengo la necesidad vital de escuchar la canción de Keane "Somewhere only we know" 10 veces seguidas y sentir un gran desasosiego que desemboca en una intensa alegría, una y otra vez, una y otra vez.


Algo que refleja la foto, o eso me parece a mí, es como un nubarrón tremendo rosa, o una nube de azúcar que te va aplastar!! Me imagino que debe de haber algun tipo de sustancia, bajo receta médica, con la que conseguir estos mismos resultados, o que Kate Middleton debió sentir algo así camino del altar. Es taaan humano.


Claro que hoy ya ha sido mi primer día anual de preinventario, que es un período vital de lo más divertido donde me puedo volver loca, bajo esta excusa, y todo el mundo me apoya y comprende.

lunes, 11 de abril de 2011


Hoy sólo me apetece recordar cosas bonitas, como el último viaje familiar a Roma, quiero quitarme esta pena, de momento no será posible, pero hoy no quiero oler a hospital. Quiero recordar las prisas, las discusiones, las risas, la abuela volando entre los pirados romanos para cruzar una calle, ella levantaba su bastón y le cedían el paso cientos de coches. No quiero poner la foto que me hizo mi tía a los pies del Tíber, porque sólo quiero olvidar hoy y ayer, pero no mañana, pero por si acaso la voy a poner, supersticiones.

Esta foto que yo no me atrevía a hacer pero hizo mi madre, pidiendole permiso al viejo barbero, yo creo que sólo tenía la barbería para que le hicieran fotos los turistas.
Hoy me he terminado de mal leer un libro bastante infumable, la típica novela de grandes mujeres del siglo XX que aspira a saga familiar muy poco creíble. Un joya, vamos, lo bueno del libro es que hacía multiples referencias a la ópera italiana de Verdi y me ha hecho tirar de vídeos, y ahora no paro de escuchar este himno, el "Va Pensiero" de Nabucco. La última foto es de una playa en Lanzarote, semanas atrás, cuando retomaba fuerzas sin saber lo que se avecinaba. Después, viendo las fotos, decidí que el que sale de espaldas en toda la secuencia en la que pruebo filtros de colores, es F. ese deconocido que se coló en mi correo con infinitos y divertidos correos durante unos días y que luego desapareció aquejado de una excusa que para mi es familiar y muy dolorosa. Fue mi primer intento con esto de los contactos virtuales y no pudo salir peor, ¿no? Luego seguí observando con gracia los mensajes de otros que me llegaban y para finalizar empecé a descubrir a gente de mi pasado y a encontrar perfiles que se parecían mucho a espinas aún clavadas en forma de diseñadores graficos talluditos. De momento como terapia ultrarrápida me compraré más pantalones vaqueros de colores, para colorear estos días y para darme cuenta que cuando una se hace mayor regresa a comprar a Zara, a ser posible la ropa con mayor pinta de pija posible. Y volver a usar marrón y camel como colores basicos y reirme yo sola de estas cosas al ver mi reflejo en los escaparates.


Va, pensiero, sull'ali dorate;


va, ti posa sui clivi, sui colli,


ove olezzano tepide e molli


l'aure dolci del suolo natal!

Menos mal que no cerré esto! Gracias.

miércoles, 2 de marzo de 2011

Detesto hacer maletas, pensar qué me voy a poner mañana y hacer planes con mucha antelación, tampoco me gusta que me cambien los planes en el último momento, o tener que decidir qué voy a almorzar la noche antes. No me gusta hacer planes, me gusta vivir el presente como si fuera eterno, si pienso en el futuro me angustio y paralizo. Ir a la compra es algo tortuoso, debo pensar que me apetecerá comer y elegir los ingredientes y calcular plazos. Con el dinero igual, este año que he vivido con 1000 € al mes yo sola sin endeudarme, ha sido muy triste porque no había lugar a la improvisación, como volver a los 15 y al llegar a los 20 € decir "me voy a casa que no tengo más dinero", o "me quedo con este jersey pelotillero". Eso sí, he aprendido a sacar partido a las cosas y buscar el detalle para sentirme un poco especial, quiero decir, que voy con un conjunto negro desgastado, pues me pinto los labios de rojo (fui lista y me fui de casa con un fondo de armario y maquillaje, indispensable, nada de ahorrar para la fianza). Algunos me dicen que debo sentirme orgullosa de haber pasado el año con mis dinerillos y mis cuentas, pero yo siento que me he traicionado, sí, soy una imbécil.
Esto he pensado porque unas personas que se dedicaron a evaluarme hace unas semanas han valorado como muy bajo mi capacidad de análisis y desarrollo de planes, algo muy importante para un directivo o una persona que tiene a su cargo a un equipo, en cambio soy muy buena plantificando y organizando.
Me siento un poco desdoblada, digamos, pero es la verdad, y también me siento un poco derrotada porque no se cómo voy a arreglar lo del desarrollo de planes cuando es algo que nunca me ha gustado, pero claro, entiendo que es algo importante para ser algo más que un "pasapapeles" que no esté al borde del desastre cada poco tiempo por no haber planeado bien algo, o simplemente para asumir uno su vida. Yo lo he intentado disimular, pero intuía que llegaría el día en que la gente lo viera, mis jefes digo, o que me llevaran al hospital con un ataque de ansiedad si me diera un tabardillo por asumir todos los papeles en mi para sacar adelante algo, que es lo que vengo haciendo hasta ahora.
Qué desastre, no me voy a venir abajo, pero esto no ha hecho más que empezar.

GETTING BETTER

domingo, 6 de febrero de 2011

Nunca, en ningún lugar,ni nadie nos preparó para mentalizarnos de lo que perdemos al hacernos mayores, al ser adultos. Mi entorno no quiso que yo tuviera prisa por saberlo, dado que he sido excesivamente realista y negativa toda la vida.
Subo las escaleras del metro escuchando por tercera vez "White Winter Hymnal", que no tengo ni puta idea de que significa, pero su melodía me engancha de manera instintiva esta mañana, mis pasos siguen su ritmo y lo que más deseo es dejar pasar las estaciones y dedicarme el día. Pero no, bajo en Callao subo la mirada veo mi edificio y pienso que me quedan dos tristes minutos de ansias de vivir, deseo no encontrarme con nadie en el ascensor para poder disfrutar del final de la canción y así recordarlo durante el resto del día a modo de melodía de acompañamiento. Error, me cruzo con mi jefa y me dice que debo enviar por mensajero algo. Modo on activado, se acabó ese gusanillo, ese tiempo para pensar gilipolleces y luego contarlas, escribirlas, fotografiarlas. Llamo al mensajero y me prometo escribir luego esto y madurarlo más, pero no hay tiempo.